domingo, 31 de octubre de 2010

No paro de escucharlos. Hace un rato que me senté acá, estaba dibujando, pero, ella y ellos me desconcentran, ese murmullo esos gritos, esa violencia cotidiana, ese ruido molesto. Entonces, me senté a escribir algo para despojarme de tanta palabreria, de tanto grito y pelea.
Abajo se escuchan palabras fuertes, densas, y mucha mucha energía de raun, si, se pelean, un papa y un hijo por lo que se escucha. Mi mama lucha con el saber que carajo les pasa, y están en mi casa, no me atrevo a llamarlos "locos", porque simplemente, no lo son, a los dos le deben haver pasado cosas para que estén así de tensos, tienen una vida no muy linda supongo, no lo se, no los conozco. De ves en cuando tengo que bancarme estas situaciones, obligada a estar en mi cuarto, por eso no puedo ir a buscar mi libro, en realidad es de Ines, mi prima. y quiero empezar a leerlo hace 5 días, pero necesitaba terminar de leer otro. que mal una ves que voy a empezar, estoy acá encerrada.
Tengo miedo, estoy tensa, necesitaba escribir, tengo miedo de tanta violencia, mi mama esta sola, y ellos no paran, quiero ir a salvarla de tanto dolor, de tanta energía negativa, de dos estúpidos que se arruinaron la vida.Y ahora quieren arreglarla a piñas. no es la forma, pero es la única que encontraron, supongo.
Quiero dejar de suponer, quiero que se vallan así no tengo que escuchar ninguna estrafalaria y retorcida palabra que me revuelva el estomago de pies a cabeza, esos dos se están dando con todo, duelen mas las palabras que los golpes, y mas si son papa y hijo, no quisiera estar es su situación. basta les diría yo, se van a matar entre ellos. espero que no. Espero que se salven de un final insierto y melodramático.
Yo sigo y ahora es peor, ahora tengo hambre, y el hambre es una necesidad, voy a bajar lenta y cautelosa, sigilosa, respiro ondo y 1 2 3 ya.

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